antes de entrar nos encontramos con la primera dificultad, la taquilla exterior está cerrada, y aunque hubiera estado abierta por su altura y disposición hubiera resultado inaccesible para usuarias de sillas de ruedas.
Para acceder al interior hay tres escalones, por lo que hemos tenido que solicitar ayuda para que el personal del cine saliera a atendernos en la puerta.
Como hemos solicitado entrar, nos han colocado una “rampa” portátil metálica simplemente apoyada en sus extremos y formada por dos raíles que tenían una pendiente de más del 21%, que es el doble de lo que permite la normativa vigente, lo que hace que la subida sea imposible, salvo que tengas una silla con motor (que no pese demasiado porque no sabemos la capacidad de carga de la rampa) o que te ayuden (lo que va en contra del principio de autonomía que está en la definición de accesibilidad).
Una vez dentro, descubrimos que la película que queríamos ver se proyecta en una de las salas de la planta alta, a la que no podemos acceder porque no hay ascensor, ni rampa que nos lo permita.
decidimos poner una reclamación cada persona y mientras esperábamos, quisimos acercarnos a tomar algo en el bar del cine, pero tampoco pudimos porque no tiene tramo de barra adaptada.
Una de las personas quiso ir al baño adaptado, había un cartel que anunciaba su existencia, pero eso es lo único que había de ese baño, el cartel… los dos baños existentes, señoras y caballeros, son completamente inaccesibles.
La persona que nos ha atendido en el cine ha llamado al gerente, D. José Manuel Vidal que nos ha dado numerosas explicaciones, entre las que destaca que unos dos meses antes del 4 de diciembre de 2017 solicitaron permiso de obras para realizar las adaptaciones, pero que el ayuntamiento aún no se lo ha concedido.
Pero esta excusa ya tiene otras versiones anteriores, a una de nuestras socias hace dos años que le contaron lo mismo, por lo que resulta poco creíble.
Le hemos comentado al gerente que además de las hojas de reclamaciones, vamos a poner una denuncia en la GMU por no haber realizado en plazo los ajustes razonables.
